El impacto de las actividades de lavado de dinero y financiamiento del terrorismo resulta en pérdidas financieras y de reputación, lo que significa salida de efectivo y pérdida de negocios y clientes. Las pérdidas reputacionales están relacionadas con la imagen de la entidad. Por lo tanto, estas pérdidas siempre se consideran significativas porque una vez que ocurren, arruinan la reputación general de la entidad. Los clientes comienzan a perder interés en la entidad y se transfieren a otras entidades para sus necesidades específicas.
Los clientes siempre pierden interés en aquellas entidades en las que se denuncian incidentes de blanqueo de capitales y financiación del terrorismo , ya que estas actividades están reconocidas en el derecho penal y varían según la jurisdicción y los requisitos de cumplimiento propuestos por los organismos locales de normalización. El blanqueo de capitales es el procesamiento de los ingresos de los delincuentes para disfrazar su origen ilegal. El blanqueo de capitales permite a los delincuentes disfrutar de beneficios y fondos sin poner en peligro su origen.
Impacto del lavado de activos y el financiamiento del terrorismo en las instituciones y sus clientes
Cuando una actividad delictiva genera beneficios considerables, el individuo o el grupo implicado debe encontrar la manera de controlar los fondos sin llamar la atención sobre la actividad subyacente o las personas implicadas. Los delincuentes lo hacen disfrazando las fuentes, cambiando la forma o trasladando los fondos a un lugar donde sea menos probable que llamen la atención. El término blanqueo de capitales describe la actividad de ocultar o encubrir la identidad de los ingresos obtenidos ilegalmente. Esta actividad tiene por objeto hacer que los ingresos obtenidos ilegalmente parezcan proceder de fuentes legítimas.
La actividad delictiva suele llevarse a cabo para generar ingresos o proporcionar un beneficio a quienes la realizan. Los grupos organizados llevan a cabo una actividad delictiva significativa, y el blanqueo es el proceso de disfrazar los orígenes ilegales y la propiedad de los bienes delictivos para permitir que los delincuentes los utilicen y disfruten sin ponerse en peligro ni atraer una atención no deseada, como la de las fuerzas del orden. El objetivo principal del lavado de dinero es aprovecharse de las actividades delictivas. El blanqueo de capitales es el resultado de casi todos los delitos lucrativos.
Las entidades que continuamente no contrarrestan o superan adecuadamente los riesgos de las actividades de lavado de dinero y financiamiento del terrorismo generalmente son bloqueadas por las autoridades reguladoras. Esto causa la pérdida de negocios existentes en forma de pérdida de clientes o participación de mercado y el posible cierre de operaciones, causando rotaciones de empleados calificados, despidos por parte de la gerencia y problemas económicos para las partes interesadas asociadas.
La pérdida de un número significativo de clientes significa la pérdida de ingresos y una disminución significativa de la rentabilidad, lo que lleva a cierres de negocios y operaciones de entidades. Tales incidentes hacen que las entidades entren en el proceso de liquidación, donde se deben cumplir las leyes y regulaciones de liquidación de empresas locales pertinentes para distribuir activos y liquidar pasivos.
Reflexiones finales
El lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo tienen impactos significativos en las instituciones financieras y sus clientes, incluidos daños a la reputación, sanciones legales y regulatorias, mayores costos de cumplimiento, mayor escrutinio de los clientes, restricciones en ciertos tipos de transacciones y mayores obligaciones de información.