La gestión de riesgos en los negocios es un proceso proactivo que implica identificar, evaluar y mitigar las amenazas potenciales para las operaciones, la salud financiera, la reputación o las partes interesadas de una organización, promoviendo así la resiliencia empresarial, el cumplimiento y el crecimiento sostenible.
La evaluación de riesgos es un proceso que implica abordar todos los riesgos identificados. La evaluación de riesgos es una herramienta clave para el proceso de gestión de riesgos, que se realiza para todos los tipos y categorías de riesgos identificados en todos los niveles de una organización. Las diferentes categorías de riesgos pueden ser riesgos financieros, riesgos medioambientales, riesgos estratégicos, riesgos operativos, riesgos de reputación, etc.
Las evaluaciones de riesgos cuantitativas y cualitativas requieren el uso de puntos de datos y evaluaciones subjetivas. Las evaluaciones cuantitativas y cualitativas dependen de la disponibilidad de datos o información correctos y de calidad, relacionados con los riesgos evaluados.
Para llevar a cabo evaluaciones de riesgos cuantitativas y cualitativas eficaces, se deben realizar una serie de pasos, incluida la identificación de fuentes de datos, puntos de datos, fuentes de riesgo, base de datos interna de pérdidas, observaciones reglamentarias, incidentes de pérdidas, etc.
Para realizar evaluaciones cuantitativas, los propietarios de riesgos utilizan datos como informes de auditoría interna, informes de incidentes anteriores y bases de datos de pérdidas, que se mantienen en una organización. La evaluación del impacto y la probabilidad de los riesgos se realiza, en la medida de lo posible, sobre la base de la información disponible o de los datos fácticos, para cuantificar el impacto del riesgo.
Gestión de riesgos en los negocios
Se realiza un análisis cuantitativo para evaluar el impacto de la ocurrencia de riesgos. La evaluación cuantitativa utiliza bases de datos internas de pérdidas, incidentes de riesgo notificados anteriormente y sus impactos, observaciones regulatorias relacionadas con el riesgo evaluado e informes de auditoría.
Las evaluaciones cualitativas del riesgo dan peso a la evaluación subjetiva del riesgo, en la que el potencial y el impacto de los riesgos se evalúan sobre la base de juicios, que pueden ser el juicio subjetivo.
La gestión de riesgos permite a las entidades mejorar su capacidad para identificar nuevos riesgos y establecer respuestas adecuadas a los riesgos, reduciendo las sorpresas y los costes de cumplimiento relacionados. Además, la organización, a través de la identificación lógica y la integración de los riesgos, encuentra las causas fundamentales y las fuentes de los riesgos.
Hay varias fuentes de las que se originan los riesgos, como los requisitos reglamentarios, incluidas las leyes, las políticas, los procedimientos, los cambios en la economía y los factores políticos, los cambios en la Perfiles de riesgo, cambios en el comportamiento de los clientes y sus transacciones, y varios otros factores internos relacionados con los empleados que tratan con los clientes para incorporarlos y verificar sus identidades.
Los riesgos pueden estar altamente correlacionados con factores dentro del contexto empresarial o con otros riesgos. Además, las respuestas al riesgo pueden requerir inversiones significativas en procesos, equipos y sistemas de cumplimiento. Los riesgos emergentes surgen cuando cambia el contexto empresarial, cambia el perfil del cliente, se introducen nuevas leyes y regulaciones, se trata de clientes o jurisdicciones de alto riesgo, etc.
Tenga en cuenta que es posible que los riesgos emergentes no se comprendan o cuantifiquen lo suficientemente bien inicialmente, y pueden justificar una reidentificación con mayor frecuencia. Además, las organizaciones deben establecer una cultura de comunicación con respecto a los riesgos emergentes. La identificación de riesgos nuevos y emergentes permite a la organización mirar hacia el futuro y les da tiempo para evaluar la gravedad potencial de los riesgos emergentes.
La ocurrencia de incidentes de riesgo puede tener consecuencias financieras, reputacionales, operativas, estratégicas y legales, y se utilizan como puntos de datos para la cuantificación del riesgo o la evaluación del impacto en términos financieros. Por ejemplo, el incidente de lavado de dinero de criptomonedas servirá como punto de datos, mientras se evalúan los riesgos futuros de lavado de dinero para diferentes criptomonedas.
Sobre la base de las evaluaciones cuantitativas y cualitativas de riesgos, se logra la clasificación de riesgos. Una vez identificados los riesgos y etiquetados con los tipos de riesgo, se realiza la evaluación de riesgos inherentes y residuales teniendo en cuenta el nivel de controles establecidos para mitigar los riesgos. Después de realizar la evaluación de riesgos residuales, los riesgos se clasifican en tres grandes niveles que son riesgos altos, riesgos medios y riesgos bajos.
Reflexiones finales
No se puede subestimar la importancia de las evaluaciones de riesgos, tanto cuantitativas como cualitativas, en la estrategia general de gestión de riesgos de una organización. Estas herramientas permiten una comprensión integral de los riesgos potenciales y la mitigación de los mismos, considerando tanto los aspectos basados en datos como los subjetivos. Facilitan la identificación proactiva de riesgos, incluidos los riesgos emergentes, y mejoran la estrategia de respuesta, reduciendo así el impacto general en el negocio. Un enfoque riguroso de la clasificación de riesgos permite a las empresas priorizar y asignar recursos de manera efectiva, lo que garantiza la resiliencia operativa, el cumplimiento legal y, en última instancia, una sólida reputación en el mercado.