Los métodos de investigación iniciales. El tipo de actividad y el material recogido por los investigadores difieren según se trate de investigaciones reactivas o proactivas. Sin embargo, como se muestra en el diagrama del proceso de investigación, todos pasan por etapas similares.
Los métodos de investigación iniciales
Cada investigación es única y puede requerir un camino diferente a través del proceso. Por ejemplo, en algunos casos, la identidad del delincuente se conoce desde el principio y la investigación pasa rápidamente a la fase de gestión de los sospechosos. En otros casos, es posible que nunca se conozca la identidad del delincuente o que sólo se descubra tras una investigación adicional.
Investigación inicial
La mayoría de los delitos denunciados a la policía son de naturaleza menor, y el agente que llega primero suele ser el único recurso necesario. A lo largo de la investigación, este funcionario puede actuar como investigador.
La calidad de la investigación, ya sea realizada en persona o por teléfono, es un factor importante a la hora de reunir pruebas que conduzcan al descubrimiento de un delito. Las oportunidades de localizar y reunir material pueden ser limitadas, por lo que los encargados de la investigación inicial deben asegurarse de que no se pierda ningún material.
Una vez que se ha asignado un delito a un investigador, es fundamental que éste recoja información de quien tomó la denuncia inicial. Las investigaciones deben llevarse a cabo de forma exhaustiva, y los investigadores no deben dar por sentado que un delito no puede ser resuelto o que será llevado a cabo por otra persona en una fase posterior.
Evaluación de la información
Una vez que se ha formulado una acusación y se han realizado algunas indagaciones preliminares, hay que decidir si es conveniente proceder a una investigación completa. Aunque esta es una decisión que suele corresponder al jefe de la organización, a menudo buscarán el consejo de los delegados para llevar a cabo las investigaciones.
La elección de proceder a una investigación interna completa es una decisión importante. Las investigaciones requieren muchos recursos y son muy sensibles. Si una investigación se maneja mal, puede tener graves ramificaciones para los individuos y la organización. Por ejemplo, se puede manchar injustamente a personas inocentes, se puede envalentonar a las personas que han actuado indebidamente por haber sobrevivido al escrutinio, se puede socavar la reputación del ejecutivo de la organización y se puede dividir el lugar de trabajo y dañar la moral del personal.
A la inversa, puede haber graves ramificaciones si no se lleva a cabo una investigación. Por ejemplo, los empleados inocentes pueden quedar con una nube negra sobre sus cabezas, los infractores podrían causar más daño en el futuro y las normas de comportamiento dentro del lugar de trabajo pueden verse socavadas. Hay varias consideraciones importantes en esta fase crítica, como se detalla a continuación.
¿Es una investigación interna el proceso adecuado?
A veces, una investigación interna no es el proceso adecuado y puede gestionarse mejor utilizando procedimientos de disputa o queja, incluida la mediación o realizando cambios en el lugar de trabajo, en lugar de aplicar procedimientos de investigación relativos a una serie de aparentes infractores.
¿Está el asunto relacionado con el desempeño de las funciones de la organización?
Lo que las personas hacen en su vida personal fuera del lugar de trabajo suele ser asunto suyo, y no es apropiado que un empleador investigue las acusaciones de mala conducta fuera del entorno laboral.
Cuando dicha conducta pueda tener implicaciones en el lugar de trabajo (por ejemplo, un consumo constante de alcohol que provoque una baja productividad en el trabajo), puede ser conveniente investigar la conducta fuera del trabajo.
En todas las circunstancias del asunto, hay que hacer varias consideraciones antes de decidir si es conveniente seguir con el asunto. Entre ellas se encuentran:
¿Qué edad tiene el asunto?
Algunos asuntos dejan de ser significativos con el paso del tiempo. Por el contrario, algunos asuntos siempre justificarán una investigación, independientemente de su antigüedad, como los que implican una suma de dinero considerable o las acciones de un miembro de alto nivel de la organización. Si ha transcurrido un período considerable desde que se produjeron determinados asuntos, esto puede tener un impacto significativo en la posibilidad de llevar a cabo una investigación justa. Es posible que los testigos ya no estén disponibles para dar cuenta de los hechos, que los documentos hayan sido destruidos, que la memoria de las personas se haya desvanecido, etc. Si ha transcurrido un período prolongado, puede ser apropiado no realizar una investigación sobre asuntos menores.
Obtenga algunos detalles preliminares
Es posible que haya que realizar algunas investigaciones preliminares menores para hacer una evaluación preliminar adecuada. Por ejemplo, ¿cuáles eran los procedimientos adecuados en ese momento? ¿Siguen siendo actuales? ¿Quiénes eran las personas implicadas? ¿Siguen trabajando para la organización? ¿Hay antecedentes de alguna empresa externa involucrada? ¿Se ha investigado este asunto o asuntos similares en el pasado? ¿Hay alguna información financiera disponible?
Las investigaciones preliminares son aquellas que se pueden hacer sin avisar a nadie de que se está llevando a cabo una investigación.
Reflexiones finales
Independientemente de cuándo se haya cometido el delito, las acciones rápidas pueden aplicarse a investigaciones reactivas o proactivas.
La primera oportunidad de obtener material podría ser la última. La identificación de estas acciones durante la fase de investigación preliminar produce los resultados más eficaces. Los retrasos en la protección, la conservación o la recopilación de las pruebas pueden dar lugar a que éstas se contaminen o se pierdan.